Con vistas encantadoras, de las que se ve una vez en la vida, la Isla de Madeira puede ser el lugar ideal para un viaje en familia. Con diversas posibilidades de entretenimiento para todas las edades y gustos, la diversión está garantizada. Con unas excelentes opciones de hoteles, gran parte de ellas son cinco estrellas y con un calendario diferenciado para niños y adultos, el destino tiene todo para dejar la familia maravillada.

Una excelente opción de paseo es embarcarse en el teleférico y apreciar la deslumbrante vista de Funchal. Aprovechando la estancia en la capital, el Museo del Juguete es una buena pedida, con una fantástica exposición de más de 20 mil piezas. Para la vuelta, el tradicional carro de cesta madeirense proporciona una aventura increíble, con mucha emoción y adrenalina.

Nombrado Patrimonio de la Humanidad, el Bosque Laurissilva es un verdadero escenario de película. Con cerca de 15000 hectáreas, el bosque ocupa el 20% de la Isla y tiene 2 mil kilómetros de caminos para encantar con la rara belleza natural encontrada. Otra opción, para los que no son fans de caminata pero no quieren perder la oportunidad, es realizar el paseo en un jeep 4×4.

El balneario madeirense también es encantador. El agua tiene una temperatura agradable todo el año y los paisajes, rodeados por los acantilados gigantes del lugar, son enamorados de cualquiera. Además, la estructura para equipos la práctica de deportes acuáticos es muy buena. Es posible practicar kayak, stand up paddle y, incluso, el surf para los que gustan de adrenalina. Como en pocos lugares en el mundo, la isla te proporciona una increíble oportunidad de observar animales marinos. Es posible pasear en un barco y avistar ballenas y delfines en la superficie o incluso sumergirse y testimoniar la fantástica fauna del Atlántico.

Al norte de la isla, es donde se ubica Porto Moniz. Un lugar que puede dejar el viaje completo. Con una variedad enorme de opciones, es posible conocer el Acuario de Madeira que, con 12 tanques de exposición, presenta los más diversos seres de la vida marina madeirense. Además de la indispensable visita a las piscinas naturales formadas por rocas volcánicas y que dejan el mar entrar naturalmente.

Isla de Madeira – Considerado como el mejor destino de la isla en el mundo, la isla de Madeira es un pequeño paraíso portuguesa situada en medio de la inmensidad del Océano Atlántico. De origen volcánico, su ubicación privilegiada proporciona clima templado y mar con temperatura agradable todo el año, además de impresionantes escenarios de montañas, valles y acantilados, todos cubiertos por la exuberante vegetación Laurissilva, nombrada Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco. El archipiélago está formado por un conjunto de islas, siendo las principales y únicas habitadas Madeira y Porto Santo. Hay excelentes opciones en balnearios, monumentos históricos y grandes hoteles y restaurantes, donde se puede degustar la deliciosa gastronomía y los premiados vinos madeirenses. Para más información, visite www.madeiraallyear.com.

Foto: Divulgación