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Gastronomia

Si a la hora de planificar un viaje usted piensa en las opciones gastronómicas que el destino presenta, Bariloche debe ser uno de sus destinos obligatorios. La pequeña ciudad de la Patagonia Argentina ofrece muchas opciones para los amantes de cervezas, chocolates, carnes, peces y tés.

Alimento de los Dioses

Uno de los atractivos turísticos más famosos de Bariloche es el chocolate artesanal. Considerada la capital nacional del chocolate, la ciudad ofrece diversas chocolaterias con una amplia opción de sabores y mezclas para el dulce. Además de los visitantes pueden acompañar el proceso de creación de esas delicias de cerca, también es posible visitar el museo construido en homenaje a lo que ya se consideró el “alimento de los dioses.”

La principal calle de Bariloche, en el centro, es un irresistible y auténtico “paseo del chocolate”. Es allí donde se realiza la Fiesta Nacional del Chocolate, durante la Semana Santa.

Oro Líquido

Otro producto artesanal que gana cada vez más reconocimiento, son las cervezas. La ciudad posee varias cervecerías que se empeñan en crear bebidas diferentes y únicas.

Las opciones de sabores son plurales y para todos los paladares. Son aproximadamente 25 emprendimientos entre bares y fábricas dedicadas a la bebida. La estimación es que se produzcan más de dos millones de litros de cerveza al año

Técnica milenaria

Los amantes de una buena comida pueden disfrutar de los platos típicos de la patagonia. A diferencia de las barbacoas de suelo de la región de los pampas, en la Patagonia, es más común la utilización de truchas y salmón, muy común en los lagos de la región, además de carneros y jabalíes. Muy difundida en Chile, la técnica llamada curanto también se puede encontrar en la preparación de los alimentos locales. En ella, se cava un agujero de aproximadamente 15 cm en el suelo, se colocan piedras calientes y el alimento cocina en ese horno natural por algunas horas. La técnica es milenaria e influencia de los pueblos nativos – se encuentra en la pintoresca Colonia Suiza, a pocos minutos del centro de Bariloche.

Caminando por el centro de Bariloche es posible encontrar varias casas de té, que además de la bebida ofrecen diversas opciones de dulces y salados. Una buena opción para una merienda de la tarde.